Samurái forjado con Kukulkán, la serpiente emplumada
Escultura de hierro personalizada, este samurái es el chef Javier Díaz Esterri, mi hermano. Y esta escultura forjada con amor tiene un grandísimo valor añadido por todo lo que significa, refleja el camino del guerrero con sus 7 principios (benevolencia, justicia, honestidad, respeto, honor, coraje, lealtad). Javier ya es un chef de nivel y hace unos 4 años le ofrecieron crear y dirigir la cocina de ZEM (complejo de lujo dedicado a la salud y bienestar en Altea), en el periodo de construcción tuvo que decidir si se iba a México a otro gran complejo de lujo de la empresa, Palmaia, en la Rivera Maya o trabajar en España en una de las múltiples ofertas que tenía, cambiar de país 4 años es un reto importante, es más cómodo quedarse en casa, pero en nuestras charlas filosóficas hablábamos de la importancia de enfrentarse a los miedos en la vida para lograr los retos, para evolucionar como personas y este era su reto. Él práctica el Jiu Jitsu y le gusta la mentalidad del samurái, hace años que me encargó uno, pero no se esperaba este que le he creado con tanto valor y significado. Javi “el samurái” vuelve victorioso de Palmaia, México (que ya lo tiene en el corazón) a España a enfrentarse al siguiente gran reto: ayudar a sanar, a cuidar los cuerpos y las mentes de las personas gracias a la alimentación saludable y a la nutrición consciente, su especialidad, en ZEM, Altea. Y en su vuelta le acompaña KU KUL KAN, la serpiente emplumada Maya que se queda dentro de él para protegerle siempre. Una escultura que une dos países hermanos México y España, una escultura cargada de energía y poder que ya no tiene valor económico porque Javier nunca la querrá vender.